El Caos
Subject: El caos
El caos que nos rodea
Hugo J. Byrne
"No he de callar por más que con el dedo,
señalando a la boca o a la frente,
silencio mandes o amenaces miedo.
¿No ha de haber un espíritu valiente?
¿Nunca se ha de sentir lo que se dice?
¿Nunca se ha de decir lo que se Siente?"
Francisco de Quevedo
De
acuerdo a la extrema izquierda que controla la inmensa mayoría de los
medios de comunicación, los claustros de educación superior y una buena parte del poder económico de América,
la presente crisis migratoria ilegal es "prefabricada". New York Times,
Washington Post, Los Ángeles Times, Miami Herald, CNN, Americaonline,
MBC, MSNBC, ABC, CBS, junto a casi todas las agencias de prensa
internacionales tales como AP, BBC, EFE, así como los venales
jueces-políticos designados por la administración anterior, unen voces y
arbitrarias decisiones judiciales a ese coro discordante, traidor y perverso.
Desde
luego, toda esa subvertida e hipócrita cantaleta tiene en su mira la
destrucción de un Ejecutivo en funciones, electo legalmente, aunque el
Presidente Trump no sea su objetivo final. El verdadero propósito es destruir a Estados Unidos y a las instituciones que le dieron vida a esta nación.
Eliminar o subvertir las instituciones de América es lo que tienen en
su mira estos contemporáneos Benedict Arnold (aunque la comparación no
sea muy justa con Arnold).
A pesar de superadas injusticias del pasado, América ha sido por siglo y medio faro y escudo de justicia y libertad. Fue América la única sociedad en la historia contemporánea capaz librar una muy sangrienta guerra civil
para, entre otras muchas acciones nobles y justas, poner fin a la
esclavitud de los negros en su suelo. En esa lucha salvaje América
perdió casi 700,000 de sus mejores hijos y el noventa y cinco por ciento
de ellos no eran negros.
Fue
América quien alzando los pendones de la libertad, enfrentara con éxito
durante el siglo pasado la agresión de totalitarios como los nazis y
los fascistas y la amenaza letal de los soviéticos. A estos últimos el
Presidente Reagan arruinó con la eficiente colaboración de la PM británica Margaret Thatcher y el Papa Juan Pablo II.
Es
evidente que son precisamente esos hechos históricos por los que
nuestras leyes y en especial nuestra constitución, son detestadas por
esa combinación peligrosa de ignorancia y maldad. Como no pueden
cubrirse muchos temas simultáneamente, hoy lo dedicaré en exclusivo a la
"crisis prefabricada" en nuestras fronteras.
Si
empezamos por la frontera sur, porque la norte es también porosa y
potencialmente de mayor peligro, encontramos que desde principios del
presente siglo la probabilidad de terrorismo desde Méjico contra Estados
Unidos ya era dramática. Adolfo Aguilar Zinser, antiguo Embajador de
Méjico en Naciones Unidas y ex Asesor de Seguridad de su gobierno,
afirmó en mayo del 2001 que su país se estaba convirtiendo en refugio y
base operacional del terrorismo musulmán. Desde hace mucho tiempo muchos
de los musulmanes emigrados a Méjico, cambian sus nombres a
patronímicos españoles No es físicamente posible determinar cuántos
terroristas ya han penetrado por la frontera mejicana, aparentando ser
simplemente extranjeros ilegales buscando empleo y una vida mejor. Pero
el hecho consumado de que ya están aquí no es conjetura, sino sentido común.
¿Por
qué esa campaña se ha tornado tan activa, violenta y anárquica
precisamente ahora? ¿Cuál es la razón verdadera en la ofensiva
histérica, caótica y anárquica contra las leyes de este país? Porque por la primera vez en muchas décadas los principios y objetivos del gobierno limitado están dando frutos. Frutos a los que nunca aspiraron los estatistas y sus aliados de ocasión, los musulmanes fanáticos.
No
haré disquisiciones sobre la personalidad colorida del Presidente
Trump. No es el primer presidente "outspoken". ¿Algún lector sabe de
Theodore Roosevelt? No todos fueron tan discretos como "silent" Calvin.
Démosle
un vistazo a sus logros solamente durante el pasado año. Comparemos a
Estados unidos con China, esa "gran potencia" que nos superará en breve,
de acuerdo a tantos "expertos". Tres trabajadores chinos combinados
producen solamente apenas el 60% de lo que produce un trabajador en
Estados Unidos. El "Producto bruto nacional" en 2018 fue $1.7 trillones
más que en 2017 y casi $8 trillones más que el de China. Mientras que
China se ve obligada a importar combustible, Estados Unidos ha subido su
producción a más de once y medio millones de barriles diarios. Por la
primera vez desde 1973 América ha recuperado su posición de mayor
productora de petróleo en el mundo. Otro tanto ha sucedido con otros
combustibles como gas natural. En cuanto al carbón, Estados Unidos
continúa siendo la segunda productora mundial.
Todo
esto quiere decir que somos independientes de otros productores y
exportadores y que los tiempos del "chantaje" desaparecieron. Eso lleva
a una pregunta lógica: ¿Por qué entonces continuamos importando crudo
de países enemigos o indiferentes a nuestros intereses, como
Venezuela o Arabia Saudita? Porque de lo contrario el precio mundial del
crudo subiría exponencialmente, perjudicando a otras naciones y aliados
que no cuentan con nuestros recursos. Una crisis de tal naturaleza
también nos afectaría, a largo plazo. No vivimos en un mundo ideal. Sin
embargo, si continuamos por este camino podremos en un futuro razonable
suplir a los afectados.
En
2018 nuestra economía creció más del 4.2% en el segundo cuarto y 3.4%
en el tercero. El índice de desempleo bajó a 3.7%, históricamente el más
bajo desde 1969. En cuanto a la protección del medio ambiente, la
iniciativa privada de América resultó muy superior a las regulaciones
estatales en el extranjero. Después que Estados Unidos se separaran del
"Acuerdo Climático de París", su porcentaje anual en reducción de
emisiones de carbón excedió el de la mayor parte de los países que
permanecieron acatando el acuerdo.
Esto
es lo que tiene fuera de sí a los partidarios del colectivismo. Por eso
es que realmente sienten un odio cerval por Trump. Por eso no lo
perdonan y orquestan cuanto pueden (ético o no) para sacarlo del poder.
Quizás su vitriólico antagonismo tenga éxito. Espero que no y prometo
hacer cuanto pueda por impedirlo.
Pasadena, enero 17, 2019.